En Benito Juárez tuvo un domingo de menor a mayor ya que con el correr de la jornada fue avanzando y consiguió culminar dentro de los diez en la segunda final del año. El funcionamiento de su unidad está en plena evolución, “Fuimos mejorando de a poco, arrancamos mal porque en la serie tuvimos un toque en donde rompimos algunas cosas, luego con el correr del día fuimos mejorando”, declaró Aquiles.

El funcionamiento del auto todavía no lo deja del todo conforme pero para el compromiso en Tandil confía en poder seguir avanzando, “Hicimos un cambio grande en el auto del año pasado a este y todavía no logramos que funcione como andaba antes, como lo puedo llevar yo al auto, pero creo que para la próxima estaremos con todo más ordenado. El auto va muy prendido de trompa, no podemos salir rápido de las curvas y no podemos aprovechar bien el chasis, que siempre anduvo bien pero todavía no conseguimos ese equilibrio”; agregó.

En cuanto al motor Sergio Messa hará algunos cambios para esta prueba en un escenario en donde la planta impulsora es muy importante, “En el motor vamos con unos cambios porque en la primera carrera habíamos roto la tapa de cilindros y ya para esta Sergio ya tenía todo como para volver a poner otra tapa. Vamos con mucha exceptiva, nunca corrí en Tandil pero por lo que he halaco con los demás colegas es muy lindo para manejar, es muy rápido. Creo que tenemos que andar bien”, aseguró.